La Comisión Europea ha señalado en una respuesta escrita a la eurodiputada Inmaculada Rodríguez-Piñero que el Acuerdo de Asociación Económica Integral Regional (RCEP, por sus siglas en inglés) «no está a la altura de las expectativas de la Unión en cuestiones como la cobertura global de acceso a los mercados, así como en lo que respecta a las normas y a la garantía del cumplimiento».
Por ello, la socialista, ponente de la Comisión de Comercio Internacional del Parlamento Europeo, pide a la Comisión Europea que vigile el desarrollo de este acuerdo y continúe con sus esfuerzos en los acuerdos bilaterales con los países. En esta misma línea, la Comisión, en su respuesta a una pregunta escrita de Rodríguez-Piñero sobre las consecuencias comerciales y económicas de la RCEP para la UE, subraya que procurar negociaciones bilaterales «permite a la UE suscribir acuerdos con un alcance más amplio y profundo».
El RCEP, que aún no ha entrado en vigor, integra a diez estados miembros de la Asociacion de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) y Australia, China, Corea del Sur, Japón y Nueva Zelanda.
El Ejecutivo comunitario ha informado a la eurodiputada de que la RCEP podría provocar «cierta desviación del comercio en detrimento de las exportaciones de la UE debido a un acceso preferencial a los mercados entre Japón y China». Pero, por otra parte, «se espera que los inversores de la UE con presencia en la región y los exportadores de la UE también se beneficien de estas medidas destinadas a facilitar el comercio de mercancías, a través de un único conjunto consolidado de normas de origen, que contribuirán a la dinámica de integración regional».