La Comisión de Empleo y Asuntos Sociales ha aprobado este martes el informe sobre acceso a una vivienda digna y asequible para todos. La eurodiputada Estrella Durá, ponente por parte del Grupo de Socialistas y Demócratas, ha destacado el compromiso de los socialistas por una estrategia global para abordar el problema de acceso a la vivienda en la UE y ha conseguido que se reconozca el derecho a la vivienda como un derecho fundamental. “La falta de vivienda adecuada, el sinhogarismo o los deshaucios constituyen una violación de los derechos humanos que ha sido hoy reconocida hoy en este informe y a la que hay que poner fin urgentemente a través de políticas públicas destinadas a proporcionar viviendas asequibles para todos, y no solo viviendas sociales para los más desfavorecidos”, ha apuntado.
“La vivienda social es el único sector en los servicios de interés económico general (SGEI) para el que la Comisión Europea menciona un grupo objetivo cuando este no es el caso de los hospitales y otros servicios sociales que se hallan excluidos de las normas de competencia y de la normativa de ayudas estatales”, ha subrayado Durá.
Por ello, los socialistas también han defendido y conseguido el reconocimiento de un modelo universalista de vivienda, así como la aprobación de medidas para la regulación de precios de alquiler, un uso responsable del suelo, el apoyo a programas de prevención del sinhogarismo, desahucios y la inclusión de la vivienda dentro del marco de los servicios de interés general permitiendo que se amplíe el grupo objetivo a todas los ciudadanos y ciudadanas y no sólo los grupos vulnerables.
Estrella Durá ha pedido además a la Comisión Europea que sea ambiciosa e integre el progreso social como una prioridad de inversión en el mecanismo de recuperación y resiliencia con el fin de proteger a las personas vulnerables contra el impacto negativo de la crisis actual, e incluir planes de progreso social en los Planes de Recuperación y Resiliencia. “Tenemos que reformar el marco de gobernanza económica de la UE para proteger los derechos de los ciudadanos y los sistemas de bienestar social en situaciones de crisis económica, incluso mediante la adopción de un Pacto de desarrollo sostenible y progreso social, exigiendo la misma legalidad que la consolidación fiscal y la estabilidad financiera”, ha asegurado la eurodiputada.
Los puntos más controvertidos de las negociaciones han sido las propuestas socialistas de regular el mercado de la vivienda para protegerla del fraude y la evasión fiscal, prevenir la corrupción, el lavado de dinero y la especulación y excluir la vivienda pública de las normas de competencia. Tampoco han salido adelante el objetivo de que el 30% de viviendas de nueva construcción sean asequibles para el grupo de ingresos bajos y medios en 2030, perfeccionar el índice de precios de la vivienda, y establecer el umbral de referencia de sobrecarga del coste de vivienda no superior al 25% de la renta familiar.
“Desafortunadamente, no sólo la derecha europea, sino que incluso también los Verdes, en algunos casos, han conseguido frenar las medidas más ambiciosas y progresistas”, se ha lamentado Durá.