El Pleno del Parlamento Europeo ha aprobado la Ley de Mercados Digitales (DMA, por sus siglas en inglés), una normativa que legislará, por primera vez en el mundo, sobre las grandes plataformas tecnológicas. Adriana Maldonado, miembro de la Comisión de Mercado Interior y Protección al Consumidor en la Eurocámara, ha destacado que “no hay ningún continente que lo haya hecho antes y, por lo tanto, Europa es un referente”.
Esta regulación establece normas sobre lo que se permitirá hacer o no a las empresas con estatus de “guardián de acceso” en la UE, es decir, aquellas grandes plataformas que prestan un servicio básico como por ejemplo: redes sociales, motores de búsqueda, sistemas operativos, servicios de publicidad en línea, computación en la nube, servicios de intercambio de videos, navegadores web, asistentes virtuales y televisión conectada.
La eurodiputada ha recordado que “las grandes plataformas dominan nuestro día a día y han cambiado nuestra forma de comunicarnos y nuestros hábitos de consumo, pero ello no significa que sean intocables. Las grandes plataformas tienen que ser reguladas y la Unión Europea está a la vanguardia con esta regulación”.
Para que una plataforma entre dentro del ámbito de aplicación de la DMA, su volumen de negocios en el Espacio Económico Europeo debe ser igual o superior a 8.000 millones de euros o cuando el valor de mercado de la empresa ascienda a 80.000 millones de euros. “Con esta nueva ley, las start-ups y las pymes, que suponen el 90% del tejido empresarial europeo, podrán competir en igualdad de condiciones con las grandes tecnológicas y llegar igualmente al consumidor”, ha asegurado.
Maldonado ha hecho hincapié en uno de los grandes logros del Grupo Socialista en esta legislación: la prohibición de la publicidad dirigida a menores de edad. A partir de los 18 años, los consumidores tendrán que dar su expreso consentimiento a este tipo de anuncios segmentados y deberá guardar lo establecido en el Reglamento General de Protección de Datos.
La eurodiputada también ha incidido en que esta ley garantiza “más transparencia a los usuarios sobre cómo las grandes plataformas utilizan nuestros datos”. En este sentido, la combinación de datos personales que procedan de cualquier otro servicio de la misma plataforma o de servicios de terceros solo será posible con el consentimiento expreso del usuario.
Desde una perspectiva de protección del consumidor, se han logrado varias demandas de los socialistas, como la inclusión de la DMA en el anexo de la Directiva de acciones de representación para la protección de los intereses colectivos de los consumidores, así como a la Directiva sobre la protección de las personas que informen sobre infracciones del Derecho de la Unión.