Apuesta por políticas que impulsen el crecimiento y consoliden el modelo social
Cuando se celebran 30 años de la firma de Tratado de Adhesión de España a la CEE (ahora Unión Europea), la presidenta de la Delegación Socialista Española en el Parlamento Europeo, Iratxe García, ha valorado el efecto positivo que ha tenido para nuestro país.
«Cuando España se incorporó a la UE se cumplía un sueño, un anhelo, ya que era un espacio de libertades, de progreso, de desarrollo», ha recordado, destacando, además, que «la política de cohesión y otras como la agrícola, beneficiaron a España, durante muchos años consecutivos e hicieron que fuera avanzando a gran velocidad».
La eurodiputada socialista reconoce, sin embargo, que, aunque España siempre se ha caracterizado por el sentimiento europeísta, actualmente se está produciendo una gran desafección en el proyecto europeo. Por ello, ha querido lanzar un mensaje de optimismo y de confianza «para que la ciudadanía vuelva a confiar en una Europa diferente a la que de los últimos años, gobernada por la derecha, una Europa que se preocupe por los problemas de la gente».
En ese sentido, ha señalado que «la austeridad no puede ser la única solución, hay que hacer políticas que impulsen el crecimiento, que hagan avanzar el modelo social europeo que tanto nos caracteriza, y que sean capaces de hacer frente a los nuevos desafíos en materia de inmigración, en materia de derechos sociales y laborales». «El reto es compaginar el desarrollo económico con el social», ha declarado.
«Necesitamos una Unión Europea que vuelva a estar en el corazón de los ciudadanos, respondiendo todos los desafíos que tenemos, esa es la responsabilidad y ese es el trabajo de la socialdemocracia europea, cambiar Europa para que sea más social, de la ciudadanía», ha concluido.